Propóleo
El PROPÓLEO es una sustancia resinosa utilizada por las abejas para cubrir y proteger la colmena. Las abejas obtienen esta sustancia a partir de las yemas y cortezas de algunos árboles.
El propóleo es rico en bioflavonoides y aceites esenciales, además de contener oligoelementos, vitaminas y aminoácidos.
El termino propóleo proviene del griego Propolis que significa “defensa de la ciudad” (Pro-antes de Polis-ciudad, lo cual se traduce como defensas antes de la ciudad o Defensor de la ciudad).
Gracias a la acción antibiótica del propóleo, que protege de la actividad de virus y bacterias, la colmena es uno de los lugares mas estériles conocidos en la naturaleza.
El propóleo contiene una gran variedad de elementos: Aminoácidos, vitaminas, minerales, etc. Entre todos estos compuestos destacan los bioflavonoides. El propóleo en estado bruto contienen 500 veces más bioflavonoides que las naranjas, los cuales son considerados hoy en día beneficiosos en estados de convalecencia. No obstante, estudios científicos llevados a cabo por diversos investigadores en todo el mundo han demostrado que el efecto del propóleo se consigue gracias a la acción sinérgica de todos sus componentes. Por su composición y propiedades suele recomendarse en caso de afecciones respiratorias recurrentes o en cualquier situación en la que las defensas del organismo están bajas.
El propóleo se emplea en la elaboración de alimentos, de cosméticos, de productos farmacéuticos y en la industria química.
En el C.A.A (Código Alimentario Argentino) se incluyó el Propóleo, definiéndose sus características organolépticas y parámetros fisicoquímico, así como su utilización en caramelos, mieles y suplementos dietarios, los cuales quedan taxativamente enumerados.
La actualización ha sido establecida por la Resolución conjunta Nº 94/2008 y 357/2008 de la Secretaría de Políticas, Regulación y Relaciones Sanitarias y de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentos, respectivamente.