El debate sobre la regularización y control de la producción de aceite de cannabis
16 de abril de 2019En entrevista con La Gaceta, el Presidente del COlegio de Farmacéuticos de Tucumán, habló sobre la situación actual de la demanda y venta del aceite de cannabis y se refirió a la necesidad de regular la producción y venta del producto.
“Es necesario ordenar la situación”, piden los farmacéuticos
Los profesionales exigen que la producción del aceite sea controlada
La Ley 27350, que se aprobó en Argentina hace poco más de dos años, solo autoriza el uso del cannabis medicinal para casos de epilepsia refractaria. Después de ser recetado por un médico y autorizado por la ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos, alimentos y tecnología médica), el producto se importa.
La ley no permite el autocultivo ni la comercialización. Sin embargo, distintos operativos policiales que se realizaron en nuestra provincia -en los cuales se secuestró aceite de marihunana- demuestran que los preparados sí se están vendiendo. No hace falta caminar muchas cuadras para comprobarlo. Incluso hay vendedores en el microcentro que lo ofrecen por $500 el gotero.
Un productor tucumano que cobra $ 1.500 por cada frasco de 30 mililitros, señaló que la demanda se incrementó notablemente. Quienes más lo piden es porque padecen artrosis, cáncer o dolores crónicos de todo tipo, señala.
El Colegio de Farmacéuticos de Tucumán manifestó su preocupación por esta realidad. “El autocultivo está fuera del marco legal. Como institución comprometida con la salud pública y con el uso racional de medicamentos, entendemos que es necesario trabajar para un ordenamiento de la situación”, señaló el presidente del Colegio, Rufo Emilio Alvez. Y propone: “hay que adecuar la legislación al cultivo del producto, bajo condiciones estandarizadas y debidamente controladas. Una vez que el producto sea recolectado, debe ser procesado en laboratorios oficiales con la supervisión de profesionales. Obtenido el producto final, tendrán que ser evaluadas sus concentraciones de CBD y THC exactamente definidas y con ellas organizar ensayos clínicos sobre las distintas patologías para las cuales se están utilizando. Luego, habrá que definir los canales de distribución y gratuita dispensación para aquellos pacientes que cuenten con la supervisión médica correspondiente”, puntualizó Alvez.
Fuente: La Gaceta